miércoles, 4 de febrero de 2009

En silencio


El caminante sobre el mar de niebla -Der Wanderer über dem Nebelmeer-, 1818,
de Caspar David Friedrich (1774-1840)



Estamos justo en medio de la cuesta, lo suficientemente lejos del valle como para no ver allí las bolsas que dejamos por exceso de peso. Todavía lejos de la cima, el mar de nubes donde todo calla como calla la ciudad durante la nevada. Recordad la nevada, esa ecuación imperfecta que tira líneas discontinuas, verticales, congeladas... La nieve, la niebla y la muerte siempre en silencio, así se escucha todo lo que olvidamos ayer, así se advierte el murmullo del agua que corre a cientos de metros bajo nuestros piés.


-... si partimos esta uva, tenemos uva para dos.




A los que caminan.